Serie Completa<< Asta la saga de Hades :)
miércoles, 5 de octubre de 2011
Seiya, Caballero de Pegaso
Seiya hace su primera aparición cuando obtiene la Armadura de Pegaso, al vencer a Cassios en la final de un "Torneo" organizado en el Santuario de Athena. Lucha también en el Torneo Galáctico, primero frente a Geki de Oso, al que derrota superándolo en su propio campo, la fuerza física, destruyendo por completo su Armadura. Luego enfrenta a Shiryu, al que vence al descubrir su punto débil, aunque termina muy malherido. Aún así, logra salvar la vida del Dragón al golpearlo en la espalda para que su corazón volviese a latir. La Armadura de Pegaso termina muerta después de este combate.
Va en busca de la Armadura Dorada de Sagitario, la que es robada por Ikki, momento en el que tiene que enfrentar al Pegaso Negro, al que logra derrotar quedando herido de muerte –por efecto de los Meteoros Negros- y siendo posteriormente salvado por Shiryu. Ya frente al Fénix, tiene un difícil combate, pero logra derrotarlo gracias a la ayuda de la Armadura de Oro, el Escudo del Dragón, la Cadena de Andrómeda y el Polvo de Diamantes.
Luego vencerá, en un ataque combinado junto a Hyoga y Shun, a Docrates. También a Medusa, uno de los Caballeros de los Abismos y más tarde a Geist.
Seiya, también enfrenta a Misty de Lagarto, el primer Santo de Plata enviado por el Patriarca para acabar con los Santos de Bronce. El combate entre ambos es desfavorable para el Pegaso, pero aún así, logra vencerlo gracias a la confusión que produjo en su rival la perseverancia que mostró durante la pelea. Después, Seiya, vencería sin muchos problemas a otro Santo de Plata, Moses de Ballena. Caería derrotado ante Asterion de Canes Venaticis, siendo salvado por Marin.
Más tarde, Seiya, en una Isla vence a Shaina, pero termina convertido en piedra por el Escudo de Medusa de Argol de Perseo, quien es derrotado por Shiryu. Luego, irá en busca de Athena, la que es raptada por Jamian de Cuervo, terminando gravemente herido tras caer por un acantilado. También vencerá a Arachne de Tarántula, gracias al apoyo de un Santo de Acero, Sho, del Escudo Terrestre.
Seiya tendrá su primer enfrentamiento contra un Santo de Oro, cuando Aioria es enviado a matar a los Santos de Bronce. En esta Batalla, Shaina lo protege arriesgando su vida. Cuando el León está dispuesto a retirarse por su error, 3 Santos de Plata, Algethi, Dio y Sirius llegan a matar a Seiya, sin embargo, éste los derrota gracias a que viste, momentáneamente, la Armadura Dorada de Sagitario, logrando también golpear a Aioria, mediante el Cosmos de su hermano Aioros. Esto hace recapacitar al León, el que se vuelve un aliado de Athena y de los Santos de Bronce.
Ya en la Saga de las 12 Casas, vence a otro Santo de Plata, Ptolemy de Flecha, luego que éste clavara una Flecha Dorada en el pecho de Athena. Antes de morir, les explica a Seiya y compañía, la forma en que podrán salvar a la Diosa.
En Aries, la Armadura de Seiya es reparada por Mu. En el Templo de Tauro, Seiya, tiene que luchar contra Aldebaran, quien le ofrece un "trato". Si el Pegaso logra cortarle uno de sus cuernos, lo dejará avanzar al siguiente Templo. Seiya, lo consigue luego de ver a través del Gran Cuerno de Aldebaran, gracias a la ayuda de los Cosmos de Marin y Athena.
En Géminis logra avanzar gracias a la ceguera de Shiryu, lo que impide que caigan en las Ilusiones de Saga. En Cáncer logra evadir a Death Mask y continúa su camino. Ya en el Templo de Leo, se mide contra Aioria, quien siendo dominado por el Satán Imperial, golpea una y otra vez a Seiya, pero éste se levanta logrando lastimar un par de veces al León, nuevamente ayudado por los Cosmos de Marin y Athena. Sin embargo, su vida es salvada por el sacrificio de Cassios, quien muere frente a Aioria, permitiendo que éste vuelva a la normalidad.
En Virgo es rápidamente vencido por Shaka, pero otro sacrificio, esta vez de Ikki, le permite seguir adelante. En Libra intenta salvar a Hyoga, pero es imposible para él. Ya en Escorpión, tiene un pequeño combate frente Milo, contra el que nada puede hacer, ya que éste tiene un mejor dominio del Séptimo Sentido y la Velocidad de la Luz, siendo nuevamente vencido. Avanza al siguiente Templo gracias a la ayuda de Hyoga.
En Sagitario supera las pruebas de Aioros y encuentra su Testamento, donde le es encomendado el cuidado de Athena. En Capricornio continúa adelante gracias a que Shiryu decide quedarse a luchar. También logra pasar por Acuario, donde es Hyoga quien combatirá. Finalmente, Seiya, avanza por Piscis, en donde peleará Shun.
Todo parece despejado, pero cae en el camino de Rosas que hay hasta los Aposentos del Sumo Sacerdote. Ahí es socorrido por Marin, lo que le permite llegar frente al Patriarca. Éste le dice como salvar a Athena, pero también se muestra como el Santo de Oro de Géminis. Seiya es privado de sus 5 Sentidos y lastimado gravemente, aún así, logra golpear un par de veces a Saga. La llegada de Ikki, quien se queda a luchar con Géminis, le permite continuar hasta el Templo de Athena y sostener el Escudo, dirigiendo el reflejo hasta la Diosa, salvando así su vida.
En la Saga de Asgard, Seiya viste la nueva Armadura de Pegaso reparada por Mu. Ahora deberá rescatar a Athena de las frías tierras del Polo Norte. Allí se enfrenta a Tholl, quien lo golpea reiteradamente, pero logra vencerlo tras recibir la ayuda del Cosmos de Athena, obteniendo el primer Zafiro de Odín. Luego es derrotado por Alberich quien previamente atrapó a Marin y lo desconcentraba diciendo que ella moriría, por lo que Seiya, termina atrapado en el Escudo Amatista, siendo posteriormente salvado por Shiryu.
Finalmente lucha contra Siegfried, el más fuerte Dios Guerrero, pero nada puede hacer contra su poder. Gracias a la protección de Shaina y los Cosmos combinados de Athena y los otros Santos de Bronce, lo golpea en su punto débil, sin embargo, es el propio Dios Guerrero quien le entrega su Zafiro de Odín, sacrificándose y protegiéndolo de Sorrento. Tras reunir los 7 Zafiros, Seiya obtiene la Armadura de Odín, la que viste para destruir el Anillo de los Nibelungos que poseía a Hilda, utilizando la Espada de Balmung.
En la Saga de Poseidón debe salvar a Athena de morir ahogada por la gran cantidad de agua que cae sobre ella. Al llegar al Santuario bajo el Mar, tiene un primer enfrentamiento contra Thetys, a la que vence rápidamente al anular su Trampa de Coral. Luego, ella le explica que debe vencer a los 7 Generales Marinos y destruir los 7 Pilares que vigilan, si es que desea salvar a su Diosa.
Camino al Océano Pacífico Norte, derrota a un grupo de Soldados Marinos, para llegar finalmente frente a Baian de Caballo Marino, el Guardián del Pilar. Ahí tiene un duro combate, ya que su enemigo poseía una férrea defensa -logra anularla al ser similar a la usada por Misty- y poderosos ataques de Viento, que lo envían incluso hasta la superficie, sin embargo, la Armadura de Pegaso se vuelve Dorada gracias a la sangre de los Santos de Oro con que fue reparada, por lo que derrota a Baian destrozando sus Escamas y destruyendo el Pilar con el Escudo de la Armadura de Libra. Llegando al Pilar del Océano Antártico, es engañado por la Metamorfosis de Kassa de Lymnades, quien se transforma en Marin haciendo pensar a Seiya que era también su hermana Seika, debido a esto, termina inconsciente y con una grave herida en su estómago.
Más tarde, arriba al Santuario de Poseidón, pero es vencido y su Armadura de Pegaso destrozada rápidamente. La Armadura Dorada de Sagitario llega en su ayuda y, gracias a los Cosmos de los otros Santos de Bronce, logra clavar una Flecha Dorada en la Diadema del Dios, después de 3 intentos fallidos, donde fue salvado por la Armadura de Oro, Shaina y Shiryu. Para rescatar a Athena, debe derribar el Sustento Principal, que ni las Armas de Libra lograron destruir. Con los poderes combinados de Hyoga y Shiryu, lo logra traspasar y salva a Athena, protegiéndola luego del Tridente de Poseidón –en el Manga, fue Kanon quien la salvó-, permitiendo que la Diosa Selle, finalmente, el Alma del Dios del Mar.
En la Saga de Hades tan solo llegar al Templo de Aries, es Teletransportado por Mu, al Coliseo –en el Manga fue a Star Hill-, para luego reaparecer en el Templo de Cáncer, donde es vencido por Giganto y luego perdonado por Myu. Tras llegar a Virgo, ayudará a enviar hacia el Cielo la energía del choque de Exclamaciones de Athena. Ya en el Templo de Athena se entera de la muerte de la Diosa y su Armadura es reparada por Shion, gracias a la sangre de ésta. La Estatua de Athena es en realidad la Armadura de Athena, por tanto, tendrá la misión de entregarla a su dueña. Llegado al Castillo de Hades, presencia la muerte de varios Santos de Oro y es vencido por Radamanthys, pero al final golpea al Kyoto, cayendo ambos al Infierno –en el Manga cae junto a Valentine-.
En el Infierno, Seiya junto a Shun, llegan al Río Acheron donde son ayudados a cruzar por Caronte, un Espectro. Sin embargo, a mitad de camino, Seiya, debe de combatir, siendo vencido y arrojado al río, pero debido a la pureza de Shun, Caronte, decide perdonarlos y llevarlos hasta la orilla. Allí ambos vuelven a enfrentarse, pero esta vez la victoria es de Pegaso, ya que conocía las Técnicas del Espectro. Una vez llegan a la Primera Prisión, son juzgados por Rune de Balrog en la Corte de Justicia, donde Seiya es enviado a uno de los Valles del Infierno como castigo, siendo salvado por la Cadena de Andrómeda. En la Segunda Prisión es devorado por Cerbero, el perro del Inframundo, pero se libera y acaba con una de sus 3 cabezas, midiéndose finalmente contra Pharao, el Espectro guardián del lugar. Está a punto de perder su corazón por la Balanza de Maldición de su enemigo, pero la intervención de un Santo de Plata, Orphee, lo impide.
Gracias a la ayuda de Orphee, llegan a Giudecca, lugar donde se encuentra Hades. Los planes para acabar con el Dios son arruinados por la llegada de los 3 Kyotos, los más fuertes entre los 108 Espectros. Orphee es asesinado, Shun poseído por el Alma de Hades y Seiya gravemente herido y lanzado a Cocytos. Será liberado de esa prisión de hielo por Valentine, quien desea la Armadura de Athena, por lo que ambos terminan enfrentándose. Seiya logra la victoria por un escaso margen debido a que nunca perdió la esperanza. Ya en el Muro de los Lamentos, presenciará el sacrificio de los 12 Santos de Oro, quienes le encomiendan a Athena.
Tras el Muro, se encuentran los Campos Elíseos protegidos por Thanatos e Hypnos, los Dioses Gemelos de la Muerte y el Sueño, respectivamente. Seiya enfrenta al primero, pero es vencido y su Armadura destrozada. Ni siquiera la Armadura de Sagitario le permite obtener la victoria esta vez, ya que es destruida también fácilmente. Sin embargo, los llamados de Seika –fue encontrada por Marin en el Santuario-, de Athena y de sus amigos, le permiten elevar su Cosmos hasta el límite, obteniendo una nueva Armadura, tan poderosa como la de un Dios, por lo que termina venciendo a Thanatos sin mayores problemas. A pesar de ser el primero en llegar frente a Hades, nada puede hacer ante al Dios del Infierno, aún así, logra entregar la Armadura a Athena. Seiya, terminará gravemente herido por la Espada del Dios, al proteger a la Diosa –en el Manga muere-, permitiendo que ella junto con los otros Santos de Bronce, finalmente acaben con Hades utilizando su Báculo.
En la Película del Tenkai-Hen, Seiya esta en estado vegetal y su Cosmos se ha "apagado", debido a la maldición que Hades le puso luego de clavar su Espada en él. A pesar de ello, Seiya se levanta para ir en ayuda de Athena, quien piensa sacrificarse por entregar el control del Santuario a su hermana Artemis. Poco a poco logra despertar su Cosmos, aunque es vencido por Shaina y Touma en un principio. Ayuda a Hyoga y Shiryu, para que estos recuperen su espíritu de pelea frente a Odysseus. Cuando Seiya logra llegar con Athena, esta clava su Báculo en Pegaso, liberándolo de la maldición de Hades, es el momento en el que Seiya logra recuperar su Cosmos para vencer a Touma. Todo parece haber terminado, pero un nuevo enemigo aparece, el Dios Apolo, quien destruye toda la vida en la Tierra. Es cuando Seiya, adquiere una nueva Armadura, con la que logra rasguñar al Dios, quien decide darles una nueva oportunidad a los humanos, pero borrando todos sus recuerdos.
Seiya aparece también en las 4 primeras Películas u Ovas...
En la Película de Eris, logra vencer a Maya de Flecha -no es el mismo que Ptolemy-, pero es envenenado por una de sus Flechas. Pese a ello, vencerá también a Orión gracias a la Armadura Dorada de Sagitario. Finalmente, acabará con la Diosa Eris, al clavar la Flecha Dorada en su cabeza y destruir la Manzana de Oro que absorbía el Cosmos de Athena.
En la Película de Dorbal, vence a Loki, uno de los Guerreros Divinos, luego de una feroz lucha. Sin embargo, Dorbal, es demasiado poderoso y veloz, pero debido a la llegada de la Armadura de Oro de Sagitario, logra vencerlo al clavar una Flecha Dorada en su pecho. Esto, mientras Frey libera a Athena, sacrificando su vida.
En la Película de Abel, enfrentará a Saga, quien fue revivido por el Dios. Seiya, había perdido toda Esperanza, pero el Santo de Oro durante la lucha, hace que la recobre y sacrifica su vida para derrotar a Jaoh y permitir que el Pegaso llegue con Athena. En el Templo de la Corona, Seiya, es vencido por Atlas, al igual que sus compañeros, pero gracias a la Armadura de Oro de Sagitario y a un ataque combinado junto a Hyoga y Shiryu, logran vencerlo. Una vez frente a Abel, los ataques de Pegaso son regresados uno tras otro, pero con su Cosmos rescata a la dormida Athena, salvándola de caer en el Yomotsu. Derrotará al Dios, al clavarle una Flecha Dorada en el pecho.
En la Película de Lucifer, Seiya, es vencido en el Templo de Athena por los Ángeles Caídos. Luego enfrentará a Belzebuth, quien lo derrota parcialmente, pero la llegada de la Armadura de Oro de Sagitario, le permitirá vencerlo. Es cuando todas las Armaduras de Oro se reúnen en el Cielo y brindan su resplandor a la Flecha Dorada, la que Seiya lanza al pecho de Lucifer, acabando definitivamente con él
Ikki, caballero de Fenix
La primera aparición de Ikki es en el Torneo Galáctico, donde derrota a Nachi del Lobo, gracias a su Puño Fantasma, para luego robar la Armadura Dorada de Sagitario junto a sus Santos Negros, lo que sorprende a su hermano y amigos.
Durante el rescate de la Armadura por parte de los demás Santos de Bronce, Ikki, vence a Hyoga, clavándole su puño en el pecho, ya que conocía las técnicas de éste, gracias al Cisne Negro, quien le envió sus conocimientos antes de morir. Más tarde, vuelve a enfrentar al Cisne, pero esta vez es superado, aunque logra recuperarse y acaba a los 4 Santos de Bronce. Sin embargo, es finalmente vencido por Seiya, quien recibe la ayuda de la Armadura de Oro, el Escudo del Dragón, la Cadena de Andrómeda y el Polvo de Diamante.
Luego de ser derrotado, éste se arrepiente y cuenta a sus compañeros, lo cruel que fue su entrenamiento en la Isla de la Reina Muerte, donde tuvo que matar a su propio Maestro para conseguir la Armadura de Bronce. La aparición de Docrates interrumpe la charla y el Fénix, se sacrifica para vencer momentáneamente al enemigo, terminando bajo un montón de rocas y aparentemente muerto. Vuelve a aparecer cuando Shun está siendo vencido por el Santo de la Llama, ya que la gran cantidad de fuego en el lugar, lo ha revivido como si fuese un verdadero Fénix. Tras esto, salva a su hermano y acaba con el enemigo fácilmente, usando su Puño Fantasma.
Ikki, no tiene mucha más participación debido a que prefiere mantenerse solitario, ya que dice no ser una persona que se mueva en grupo. Esto, hasta que ayuda a rescatar a Athena de las manos de Dante y Capella, dos Santos de Plata, que intentaban llevársela al Santuario por órdenes del Patriarca. Allí derrota a Capella, quien termina cortándose con sus propios Discos, al estar confundido por las Ilusiones del Fénix. Luego, Ikki, deja el lugar de la batalla confiando en que Shun eliminará a Dante.
Ya en la Batalla de las 12 Casas, despierta temporalmente e interfiere en la concentración de Saga, para así poder ayudar a Shun en el Templo de Géminis, antes de que éste caiga en la Otra Dimensión del Santo de Oro. Sin embargo, vuelve a dormirse en el Volcán de la Isla Kanon, para recuperar sus heridas y fortalecer su Armadura -en el Manga, lo hace para sanar el brazo que Hyoga le congeló, siendo el propio Cisne quien le aconseja que vaya a ese lugar-.
Luego de sanar sus heridas, Ikki, enfrenta a 2 discípulos de Shaka –sólo en el Anime-, a los que derrota una vez que Athena bloquea el Cosmos del Santo de Oro, quien ayudaba a sus alumnos inmovilizando al Fénix. Reaparece en el Templo de Virgo, donde vuelve a enfrentar a Shaka, e impedir que éste acabe con los demás Santos de Bronce, incluyendo a su hermano. Ikki es ampliamente superado por su rival y sus técnicas son inutilizadas una a una, e incluso, le son regresadas. Ante esto, el Fénix cae, por decisión propia, en el Tesoro del Cielo de su adversario, engañándolo y dejándose privar de sus 6 Sentidos, para de esa forma, superar el Cosmos del Santo de Oro. Debido a este incremento en su Cosmos, logra llevar a su enemigo a un lugar donde no existe el Tiempo ni el Espacio, sacrificando su vida, pero permitiendo a Shun y los demás seguir su camino.
Ikki, regresa al Templo de Virgo junto a Shaka, gracias a la ayuda de Mu. Allí le son restaurados sus Sentidos y su Armadura renace nuevamente de las cenizas –en el Manga adquiere la forma usada en la Saga de Poseidón-. De esta manera, va directamente a los Aposentos del Patriarca para ayudar a Seiya –en el Manga conversa con sus compañeros caídos en los Templos de Capricornio, Acuario y Piscis-. Ya en aquel lugar, se queda a luchar contra Saga, cubriendo en todo momento al Pegaso, mientras éste va por el Escudo de Athena que está en el Templo de la Diosa. Una vez logrado el objetivo, el Fénix es derrotado y privado de sus 5 Sentidos –en el Manga su cuerpo es pulverizado por el ataque de Saga-. Ikki, aparecerá finalmente en el Templo de Athena para brindar su Cosmos a Seiya.
En la Saga de Asgard, llega para salvar la vida de Shun, quien estaba a punto de morir a manos de Mime de Benetnasch. Ikki le hace frente a este poderoso Dios Guerrero, pero es superado tanto en poder como en velocidad. Aún así, logra que su enemigo reconozca el cariño que sentía hacia su padre adoptivo, a quien mató cuando era un niño, consiguiendo revertir la situación a su favor. El Fénix anula el Réquiem de Cuerdas de Mime, rompe su Lira y lo derrota en un último intercambio de golpes, sin Armaduras de por medio. Tras esto, Ikki, cae inconsciente luego de que Shun se retire del lugar, llevando consigo el Zafiro de Odín.
Vuelve a aparecer para proteger a Shun y Shaina, de las manos de Bud de Alcor, el gemelo de Zeta, quien se ocultaba entre las sombras para poder ocupar el lugar de Syd, una vez que éste fuese derrotado. La desventaja del Fénix es notoria, sin embargo, sus palabras terminan por convencer a Bud, quien reconoce que en el fondo deseaba proteger a su hermano. Debido a ello, se retira del campo de batalla, llevando en sus brazos el cuerpo de su gemelo y permitiendo que los Santos de Bronce sigan adelante. Más tarde, enfrenta a Siegfried de Dubhe, el más poderoso Dios Guerrero, pero nada puede hacer contra él y es vencido rápidamente, en un pequeño combate de alta velocidad y poder. Finalmente, protege a Seiya de la Lanza de Hilda, la que es clavada en su estómago.
En la Saga de Poseidón, nuevamente salva a su hermano Shun, esta vez de Kassa de Lymnades, el Guardián del Pilar del Océano Antártico. La lucha es desigual, Ikki supera ampliamente el poder del General Marino, quien a pesar de su habilidad de convertirse en el ser más preciado de sus víctimas –se transforma en Shun-, no logra engañar al Fénix, por lo que cae derrotado fácilmente y sin remordimientos. A pesar de ello, Kassa, muere feliz al descubrir el punto débil del Santo de Bronce, la fallecida Esmeralda. Ikki termina derribando el Pilar con la Lanza de la Armadura de Libra.
Tras dirigirse directamente al Santuario de Poseidón, debe hacer frente al Dragón Marino, quien abandonó su Pilar para detener al Fénix. Allí se descubre que este General Marino es en realidad el hermano gemelo de Saga de Géminis, Kanon, quien termina por enviar a Ikki, a una extraña dimensión con su Triángulo Dorado. Sin embargo, la lucha es retomada en el Atlántico Norte, en donde el Santo de Bronce vuelve a aparecer tras liberarse del ataque de su enemigo. Finalmente, el Fénix descubre la verdad, Poseidón está siendo manipulado por Kanon, quien es el verdadero causante de la Guerra Santa. Esto provoca que no desee luchar más, al considerar indigno a su rival, terminando por derribar el Pilar con uno de los Escudos de la Armadura de Libra.
En la Saga de Hades, se mantiene al margen de la batalla. Sabe que en un inicio, los Santos de Bronce nada pueden hacer y sólo espera su oportunidad, para ayudar cuando realmente sea necesario.
Ya en el Infierno vuelve a aparecer, esta vez en la Quinta Prisión, donde ayuda a Kanon, quien estaba siendo atacado por los 3 Kyotos de Hades. Es aquí, cuando Ikki se enfrenta a uno de ellos, Aiacos de Garuda. El combate es parejo y ambos se golpean mutuamente. En un inicio, el Espectro es más veloz, pero la ventaja pasa rápidamente al lado del Fénix, ya que el mismo ataque no funciona dos veces contra un Santo. Debido a esto, es que termina acabando sin mayores problemas con este poderoso enemigo.
Luego de su victoria, es teletransportado hasta Giudecca por petición de Hades. Al ver que el Alma del Dios se ha apoderado del cuerpo de Shun, decide luchar y acabar con él, ya que comprende que su hermano desea sacrificarse para poner fin a la Guerra Santa. Sin embargo, los ataques de Ikki son inútiles y cuando Hades está a punto de derrotarlo, Andrómeda recupera el control sobre su cuerpo, dándole una chance al Fénix, el que finalmente se niega a matarlo, por lo que es vencido y lanzado a Cocytos. Allí se libera gracias al Cosmos de Athena y llega al Muro de los Lamentos, donde es interceptado por Pandora, quien le entrega su Collar para que pueda cruzar sin problemas. Ella lo hace para que vengue la muerte de toda su familia, ya que por fin comprendió que el Dios fue el causante de sus muertes. Tras esto, Ikki, acaba con los últimos Espectros y deja el Rosario de Shaka junto al cadáver de Pandora.
Dentro de los Campos Elíseos, se enfrenta a Thanatos, Dios de la Muerte, logrando romper su Diadema, lo que le permite ser reconocido como el más fuerte, debido a tal hazaña. Aún así, Ikki es vencido con facilidad al igual que sus compañeros. Luego intenta detener a Hypnos, Dios del Sueño, para permitir a Seiya ir frente a Hades, pero Shun, decide quedarse a luchar contra aquel Dios, pidiendo a su hermano ir en ayuda de Pegaso. Una vez frente al Dios del Infierno, obtiene su Kamui, ya que accidentalmente toca la sangre de Athena, que brotaba del Jarrón donde estaba prisionera, pero esto de nada sirve y termina cayendo ante el enorme poder de Hades. Finalmente, ayuda con su Cosmos a que Athena clave su Báculo en el pecho del Dios.
En el Tenkai-Hen, junto a Shun, luchan contra Theseus, uno de los Ángeles de Artemis. La diferencia entre sus poderes es notoria y ambos hermanos son vencidos. Sin embargo, heredando la voluntad de los Santos de Oro, vuelven a ponerse de pie. Esta vez, mientras Shun distrae al enemigo, Ikki, se encarga de darle el golpe final, pulverizándolo por completo.
Ikki, aparece también en las 4 primeras Películas u Ovas...
En la Película de Eris, salva a Shun, de las cuerdas de Orpheus, para luego acabarlo con suma facilidad, aún cuando en un inicio, el Ghost Five había anulado su Puño Fantasma. Luego de esto, se dirige donde la Diosa de la Discordia, teniendo que luchar contra Orión. Ambos son muy fuertes y la pelea es pareja, pero Ikki finalmente termina cediendo y es derrotado.
En la Película de Dorbal, protege a su Shun, de Ullr, un Guerrero Divino, a quien derrota nada más llegar al campo de batalla. También hace frente a Runng, al que engaña con sus Ilusiones, logrando que él mismo sea quien se hiera de muerte. Sin embargo, cuando intenta rescatar a Shun de un acantilado, es atacado por el propio Runng, lo que hace que todos caigan al vacío y los hermanos salven sus vidas gracias a las Cadenas de Andrómeda.
En la Película de Abel, ayuda a Shun, quitándole la Rosa Blanca que Afrodita clavó en su pecho, para luego vencer fácilmente al Santo de Oro -que había sido revivido por Abel-, al confundirlo con sus Ilusiones y hacer que clavara una rosa en su propio pecho. Luego, es atacado a traición por Berenike, un Guerrero de la Corona, cayendo vencido junto a Andrómeda.
En la Película de Lucifer, impide que Eligor, un Ángel Caído, tome la vida de su hermano, para luego eliminarlo con suma facilidad. Tras dejar abandonado a Shun, llega frente a Lucifer e intenta rescatar a Athena del camino de espinas, pero le es imposible y termina siendo derrotado por Belzebuth.
Shiryu, Caballero de Dragon
La primera aparición de Shiryu es en el Torneo Galáctico donde se enfrenta a Seiya, pero a pesar de la ventaja que tenía en poder termina perdiendo el combate, cuando su rival detecta el punto débil de su técnica. Durante la pelea, el corazón de Shiryu se detiene, pero vuelve a la vida gracias al propio Seiya, que lo golpea en su espalda. Durante este combate vemos parte del entrenamiento de Shiryu, en Rozan.
Luego de esto, Shiryu parte a Jamir en busca de Mu, para que repare las Armaduras del Pegaso y el Dragón, las que resultaron muertas luego del combate en el Torneo Galáctico. Tras superar algunas pruebas, el Dragón finalmente llega al Castillo de Mu. Éste le menciona que para reparar las Armaduras deberá sacrificarse y dar la mitad de su sangre, ya que es la única manera de revivirlas, algo que Shiryu hace sin dudar.
Durante el rescate de la Armadura Dorada de Sagitario que estaba en manos de Ikki, Shiryu, debe enfrentar a su doble, el Dragón Negro -en el Manga el Dragón Negro tenía un hermano gemelo-, con el que tiene muchos problemas al encontrarse débil por la pérdida de sangre que sufrió en Jamir. Sin embargo, en un ataque arriesgado logra vencerlo, aunque termina desangrándose. Es ahí cuando el Dragón Negro, conmovido por la valentía y amistad de Shiryu, lo ayuda deteniendo la hemorragia, para posteriormente morir. Ya contra Ikki, nada pueda hacer, pero su Escudo del Dragón ayuda a que Seiya derrote al Fénix.
También vence a Delfín, uno de los Caballeros de los Abismos.
Cuando los Santos de Bronce piensan ir al Santuario, caen en una Isla por culpa de 3 Santos de Plata, Shaina, Argol y Spartan. Luego de que Seiya y Shun, son convertidos en piedra por el Escudo de Medusa de Argol, Shiryu, debe enfrentarlo. El Dragón está en problemas debido a la habilidad de su adversario y ni siquiera la llegada de los Santos de Acero le permiten tomar la ventaja. Por este motivo, Shiryu, decide quitarse la vista para no ser convertido en piedra y lograr vencer finalmente a Argol, lo que permite que sus amigos regresen a la normalidad.
Debido a su ceguera, Shiryu, regresa a Rozan junto a Shunrei, donde lucha y vence a su ex compañero de entrenamiento, Ohko, quien le hace recuperar el espíritu de pelea para que vaya junto a sus compañeros de Bronce al Santuario. Poco antes de partir, un Santo de Oro, Death Mask de Cáncer, llega a intentar tomar la vida del Maestro de Shiryu, Dohko. El Dragón combate contra el Santo Dorado, logrando incomodarlo por algunos instantes, pero todo cambia rápidamente y cuando Shiryu, está a punto de ser derrotado, es salvado por Mu, por lo que Death Mask, se retira. Aquí es donde se revelan las identidades de Dohko y Mu, como Santos de Oro de Libra y Aries, respectivamente.
Shiryu, vuelve a aparecer en el Santuario, para unirse a los demás Santos de Bronce, en su camino por salvar a Athena, antes que la Flecha Dorada termine de clavarse en el pecho de la Diosa. En Aries, la Armadura de Shiryu es reparada por Mu. En Tauro, Aldebaran, lo deja avanzar luego de que sus manos fuesen congeladas por un ataque combinado entre Shiryu, Hyoga y Shun. Por Géminis, logra pasar sin problemas, ya que su ceguera impidió que se viese afectado por las Ilusiones de Saga.
En el Templo de Cáncer decide quedarse a combatir nuevamente contra Death Mask, pero su Alma es enviada rápidamente al Mundo de los Muertos, por el ataque del Santo Dorado, aunque logra regresar gracias a la ayuda de Athena. Sin embargo, es enviado nuevamente a ese lugar. Pero esta vez, Death Mask, decide ir personalmente para acabar con la vida del Dragón. Gracias a la ayuda de los rezos de Shunrei, los zombies y a que la Armadura de Cáncer abandona al Santo de Oro, Shiryu, recupera la ventaja en el combate y logra vencer a Death Mask, al hacerlo caer directamente en el Yomotsu, el agujero de donde jamás podrá salir. Con esto, el Alma del Dragón regresa a su cuerpo en Cáncer, para reunirse con Shun y ambos poder seguir su camino.
Antes de llegar a Leo, es vencido por Cassios, quien posteriormente sacrifica su vida para permitir que Aioria, salga del trance del Satán Imperial. En Virgo es rápidamente derrotado por Shaka, pero gracias al sacrificio de Ikki, Shiryu, logra avanzar. En Libra libera a Hyoga, del Ataúd de Hielo hecho por Camus, al usar una Espada de la Armadura de Libra. Ya en Escorpión, tiene un pequeño enfrentamiento con Milo, contra el que nada puede hacer, siendo superado tanto en poder como en velocidad, pero logrando continuar gracias a la llegada de Hyoga.
En Sagitario logra superar las pruebas de Aioros y encuentra su Testamento, donde le es encomendado el cuidado de Athena. Junto a Seiya, Hyoga y Shun, llegan a Capricornio, donde se queda a luchar contra Shura, permitiendo que los demás sigan adelante. En este combate, la Armadura del Dragón es cortada en pedazos y, Shiryu, resulta gravemente herido en su corazón por los ataques letales del Santo de Oro. A cambio, el logra romperle el brazo izquierdo y cortarle el derecho. Cuando el Dragón ya no tiene otra alternativa, utiliza la técnica que le prohibió su Maestro, el Último Dragón, con el que ambos se elevan al Espacio para convertirse en Polvo de Estrellas. El sacrificio de Shiryu, hace que Shura, se arrepienta de su accionar y lo protege con la Armadura Dorada de Capricornio enviándolo de vuelta a la Tierra, al tiempo que también le hereda, Excalibur. Shiryu, aparecerá finalmente en el Templo de Athena para brindar su Cosmos a Seiya.
En la Saga de Asgard, reaparece para salvar a Seiya de caer en un acantilado. Luego comentará que se deben reunir los 7 Zafiros de Odín para conseguir la Espada de Balmung y así quitar la Sortija de los Nibelungos de la mano de Hilda. Shiryu, enfrentará más tarde a Phenril y sus Lobos, quien lo supera fácilmente con sus veloces y letales ataques. En este combate, el Dragón pierde momentáneamente la vista por la sangre que cae de una herida hecha por Phenril. Cuando todo parece perdido, Shiryu, usa el poder del Dragón Naciente para producir una avalancha, la que acaba con su enemigo, mientras el termina cayendo en un acantilado al ser atacado por los Lobos.
Tras recuperarse, enfrenta a Alberich en el Bosque de los Espíritus, a quien debe derrotar para recuperar los Zafiros de Odín que el Dios Guerrero quito a Hyoga y Seiya. Gracias a los consejos de Dohko, Shiryu, logra anular la Unidad de la Naturaleza de Alberich, pero no es mucho lo que puede hacer al tener que mantenerse inmóvil. En una estrategia arriesgada, se quita la Armadura engañando a su enemigo al hacerlo utilizar el Escudo Amatista. De esta manera obtiene la victoria por un escaso margen, recuperando así los Zafiros y liberando a sus compañeros de las prisiones de Amatista. Finalmente, Shiryu, enfrenta a Siegfried, descubriendo su punto débil, el cual es similar al suyo. Cae vencido ante el enorme poder del más fuerte Dios Guerrero, pero feliz de mostrar a Seiya la forma en que podrá derrotarlo.
En la Saga de Poseidón, es el último Santo de Bronce en llegar al Templo Submarino, donde se enfrenta a Krishna de Chrysaor en el Pilar del Océano Índico. Ni siquiera el Escudo del Dragón con Brillo Dorado, es capaz de detener la poderosa Lanza de Oro del General Marino, por lo que Shiryu, termina quitándose la Armadura. Su intención es cortar la Lanza con la Excalibur que le heredó Shura, lo que consigue después de un segundo intento. Todo parece terminar, pero Krishna, poseía un poder aún más grande gracias a sus 7 Chakras. Esto complica al Dragón, ya que la nueva técnica del General Marino le priva de la vista poco a poco, sin embargo, en un último esfuerzo, Shiryu, logra usar nuevamente Excalibur y cortar los 7 Chakras de un solo golpe, la única forma en que podía derrotar a su enemigo. Luego derriba el Pilar gracias a una Espada de la Armadura de Libra.
Shiryu, sólo reaparece en el Templo de Poseidón, protegiendo a Seiya de la Flecha de Sagitario, la que se clava en su pecho. Finalmente, viste la Armadura de Libra para hacer frente a Poseidón, junto a Hyoga y Seiya, pero sólo logran detenerlo por un instante, momento que aprovecha para lanzar al Pegaso hasta el Sustento Principal con la ayuda de Hyoga y así lograr rescatar a Athena.
En la Saga de Hades, Shiryu, vence en Rozan a Argol, Dante y Capella que fueron revividos por el Dios –sólo en el Anime-. Luego parte al Santuario e intenta ayudar a Dohko en su combate con Shion, donde aprenderá un nuevo ataque, los 100 Dragones de Rozan. Tras pasar varios Templos llega a Virgo, donde ayuda, junto a los demás Santos de Bronce, a enviar hacia el Cielo la energía del choque de Exclamaciones de Athena –en el Manga lo hace solo-. Ya en el Templo de Athena, su Armadura será reparada por Shion gracias a la sangre de Athena. Habiendo llegado al Castillo de Hades, presencia la muerte de varios Santos de Oro, para luego ser derrotado por Radamanthys.
Ya en el Infierno, Shiryu, viaja junto a Hyoga y Kanon. En la Tercera Prisión, vence al Espectro Rock de Golem, fácilmente. Sin embargo, en la Cuarta Prisión es derrotado sin problemas por Phlegyas de Lycaón. En la Quinta Prisión, Kanon, se queda a luchar con Radamanthys, permitiendo al Dragón seguir avanzando junto al Cisne. Finalmente, presencia la destrucción del Muro de los Lamentos, gracias al sacrificio de los Santos de Oro. Mientras sus compañeros de Bronce se disponen a cruzar el Muro, el se queda a combatir con 3 Espectros, Queen, Gordon y Sylphid, donde debe utilizar la mayoría de sus técnicas para poder derrotarlos por una pequeña diferencia.
Tras llegar hasta los Campos Elíseos, con la ayuda de Hyoga, se enfrenta con Thanatos, Dios de la Muerte, pero es vencido con suma facilidad al igual que sus compañeros. Luego lucha contra Hypnos, Dios del Sueño, al que logra eliminar tras obtener su Kamui y realizar un ataque combinado junto a Hyoga. Finalmente, llega frente a Hades y brinda su Cosmos para que Athena acabe con el Dios, atravesándolo con su Báculo.
En el Tenkai-Hen, junto a Hyoga, luchan contra Odysseus, uno de los Ángeles de Artemis, pero ambos son derrotados. Las palabras de Seiya, reviven el espíritu de pelea del Dragón y el Cisne, quienes logran derrotar al fin a su enemigo. En este combate, la Armadura Divina de Shiryu es destrozada.
Shiryu aparece también en las 4 primeras Películas u Ovas...
En la Película de Eris, enfrenta a Yan de Escudo, uno de los Ghost Five, con quien tiene un duro Combate, ya que el Escudo del Dragón es pulverizado con suma facilidad, pero aún así, Shiryu, consigue la victoria tras golpear con todo su poder al enemigo, rompiendo también su Escudo y acabando con su vida.
En la Película de Dorbal, debe luchar contra Midgard, un Guerrero Divino, que no es otro más que Hyoga, quien está siendo controlado. En un inicio, Shiryu, no desea combatir, sin embargo, al ser congelado uno de sus brazos y ver que su amigo no regresa a la normalidad, decide luchar. Ambos intercambian sus mejores ataques y el combate termina en un aparente doble KO.
En la Película de Abel, otra vez lucha contra Death Mask, quien es revivido por el Dios. En un inicio se deja golpear, pero todo era una trampa para hacer que el Santo de Oro revelara que había sucedido con Athena. Luego de esto, derrota a Death Mask fácilmente, aunque es atacado a traición por Berenike, cayendo inconsciente. Finalmente termina vistiendo la Armadura de Libra, con la que logra vencer al último Guerrero de la Corona, Atlas, en un ataque combinado junto a Hyoga y Seiya.
En la Película de Lucifer, se queda a luchar contra dos Ángeles Caídos, Astaroth y Belzebuth, permitiendo que Seiya, Hyoga y Shun, sigan avanzando en el Pandemonium. Tras intercambiar golpes con Astaroth, lo derrota al golpearlo directamente al atraparle la mano con su cuerpo lastimado. Pero nada puede hacer contra Belzebuth y termina derrotado.
Hyoga, Caballero de Cisne
A diferencia de los otros caballeros de bronce, Hyoga es el único que conoció a su madre –la hermosa Natasha- y vivió con ella. Además, es el único de los diez caballeros de bronce conocidos que no tiene origen plenamente japonés: Hyoga es hijo de padre japonés y madre rusa, nacido él mismo en ese gélido país bajo el signo de Acuario.
Afortunadamente, el destino quiso que su lugar de entrenamiento fuera el mismo sitio donde estaba enterrado –bajo una profunda capa de hielo– el barco en el que había naufragado su madre. La saga nos revela emotivas escenas de reencuentro entre la madre fallecida y el nostálgico caballero.
En el manga, su maestro “directo” es el caballero dorado de Acuario, Camus; sin embargo, en el animé su instructor es el Caballero Cristal, quien a su vez había sido alumno de Camus de Acuario.
Inicialmente, Hyoga entrenaba con el propósito de volverse lo suficientemente fuerte como para recuperar el cuerpo de su madre, provocando el desprecio permanente de su compañero de adiestramiento caballeresco, llamado Isaac, quien salvó a Hyoga cuando éste se adentró en el mar congelado. Semejante acto de filantropía y amistad tuvo una lamentable consecuencia: Isaac se perdió para siempre en las profundidades de las frías aguas.
Tras este triste incidente, Hyoga se entrenó en cuerpo y alma para convertirse en el caballero de bronce del Cisne. Incluso después de convertirse en caballero, siguió atado al recuerdo de su madre. La visitaba constantemente en su gélido lecho, pero Camus interpretó este comportamiento como el principal defecto de su discípulo: su “talon de Aquiles” era la imposibilidad de librarse de los sentimientos y emociones personales en el campo de batalla.
Por este motivo, cuando Hyoga debió enfrentar a Camus en la batalla de las Doce Casas, su maestro no tuvo más opción que hundir aun más profundamente el barco en el que se encontraba enterrada su madre y encerrar a Hyoga en un ataúd de hielo, para evitarle una muerte deshonrosa a manos de otro caballero dorado.
Sin embargo, Hyoga fue liberado por Shiryu –caballero de bronce de Dragón– quien empleó la espada perteneciente a la armadura dorada de Libra. Fue en esta ocasión cuando Hyoga demostró que sí estaba capacitado para ser un verdadero caballero: luchó valientemente contra Milo en la casa de Escorpio y luego contra el mismo Camus. En esta batalla, el cisne Hyoga desarrolló su Séptimo Sentido e hizo descender la temperatura de su ataque hasta el Cero Absoluto, venciendo a su maestro Camus.
En la Saga de Asgard, es el primero en llegar al Polo Norte, donde es atrapado, encerrado y torturado, hasta que la hermana de Hilda, Flare, lo libera para escapar juntos y unirse a Athena. Tras separarse de sus compañeros, Hyoga, debe luchar contra Hagen, un Dios Guerrero que manipula tanto el fuego como el hielo. El Cisne se ve en serios aprietos, ya que incluso es llevado a una cueva rebosante de Magma y con un calor infernal. Aún así y, gracias a la intervención de Flare, logra revertir la situación, anular las llamas de Hagen, y derrotarlo con su aire frío, consiguiendo así, un Zafiro de Odín. Más tarde, enfrenta a Alberich, en el Bosque de los Espíritus. A pesar de que el Dios Guerrero utilizó su Espada de Fuego, para anular algunas técnicas del Cisne, la ventaja del Santo de Bronce era notoria. Por este motivo, Alberich, lo guía hasta lo más profundo del bosque, para derrotarlo utilizando los Espíritus de la Madre Naturaleza y encerrarlo con su Escudo de Amatista. La intervención de Shiryu, impide que ello suceda, salvando al Cisne y venciendo al Dios Guerrero. Esto permite que Hyoga, siga su camino junto a Seiya. Ya dentro del Palacio Valhalla usa el resto de su energía para destruir unas rocas y permitir que su compañero continúe avanzando.
En la Saga de Poseidón, luego de ser informado por Seiya, sobre como salvar a Athena, llega hasta el Pilar del Océano Antártico, donde encuentra a Camus. Esto no es más que un engaño de Kassa de Lymnades, quien tenía la habilidad de transformarse en los seres queridos de sus víctimas. Debido a esto, Hyoga, es atacado a traición por el General Marino, quien lo hiere gravemente en su cuello, cayendo inconsciente. Luego que Ikki derrota al enemigo, el Cisne parte en dirección al Océano Ártico.
Allí debe luchar contra su ex compañero de entrenamiento en Siberia, Isaac de Kraken, ahora convertido en General Marino. En un inicio, Hyoga, no deseaba luchar y se deja lastimar un ojo, ya que su viejo amigo había perdido uno, por salvarlo en el pasado. Sin embargo, la llegada de Kiki, y los golpes que Isaac, le daba a éste, lo hicieron despertar y finalmente se decide a combatir. Su Armadura consigue un Brillo Dorado, gracias a que fue revivida con la sangre de un Santo de Oro y, tras abrirse la herida en su cuello, Hyoga, realiza un último ataque apoyado por sus Maestros, con el que logra vencer al General Marino y destruir el Pilar con un Tongfar de la Armadura de Libra.
Hyoga, reaparece ya en el Santuario Marino, para apoyar a Seiya, pero su Armadura es destrozada rápidamente por Poseidón. Luego, une su Cosmos al de sus compañeros, consiguiendo que la Flecha de Sagitario se clave en la Diadema del Dios. Posteriormente, viste la Armadura Dorada de Acuario, logrando retener a Poseidón por unos instantes, para finalmente lanzar a Seiya contra el Sustento Principal, en un ataque combinado junto a Shiryu.
En la Saga de Hades, Hyoga, derrota en Siberia, a Misty, Babel y Moses, que fueron revividos por el Dios del Infierno -sólo en el Anime-. Tras llegar al Santuario y dirigirse a Virgo, ayuda a enviar hacia el Cielo la energía del choque de Exclamaciones de Athena. Ya en el Templo de Athena, su Armadura es reparada por Shion, gracias a la sangre de la Diosa. Finalmente, en el Castillo de Hades, presencia la muerte de varios Santos de Oro, incluido su Maestro Camus. Venga su muerte derrotando al Espectro, Zeros de Frog, pero nada puede hacer contra Radamanthys, cayendo vencido.
Ya en el Infierno, Hyoga, viaja junto a Shiryu y Kanon. En la Tercera Prisión acaba rápidamente con Ivan de Troll, a quien ni siquiera deja terminar de decir su nombre. En la Cuarta Prisión es vencido por Phlegyas de Lycaón, al igual que Shiryu, siendo salvado por Kanon. Ya en la Quinta prisión, el Santo de Oro se queda a luchar con Radamanthys, permitiendo a Hyoga, poder seguir su camino junto al Dragón. Finalmente, está presente en la destrucción del Muro de los Lamentos, por el sacrificio de los Santos de Oro. Antes de saltar por el agujero en el Muro, se queda a luchar contra uno de los 3 Kyotos del Infierno, Minos, reteniéndolo para que Seiya y Shun, logren cruzar. Tras una pequeña batalla donde las fuerzas parecen igualadas, Hyoga, salta a través del Muro, pero es atrapado por uno de los hilos de Minos, quien sigue al Cisne y explota en el trayecto, al no poseer una protección Divina como él.
Luego de llegar a los Campos Elíseos, enfrenta a Thanatos, Dios de la Muerte, pero es vencido con facilidad al igual que sus compañeros. Ya contra Hypnos, Dios del Sueño, consigue su Kamui y derrota al Dios, en un ataque combinado junto a Shiryu. Finalmente, llega frente a Hades, brindando su Cosmos para que la Diosa Athena atraviese al Dios, con su Báculo, poniendo fin a la Guerra Santa.
En el Tenkai-Hen, nuevamente junto a Shiryu, luchan contra Odysseus, uno de los Ángeles de Artemis, siendo derrotados. Las palabras de Seiya, reviven el espíritu de pelea de ambos, permitiéndoles derrotar por fin a su enemigo. En este combate, la Armadura Divina de Hyoga, es destrozada.
Hyoga, aparece también en las 4 primeras Películas u Ovas...
En la Película de Eris, tiene una cercana relación con la joven que es usada como cuerpo humano, por la Diosa de la Discordia. También debe enfrentar a Christ, de la Cruz del Sur, con quien tiene un rudo combate, pero al que está a punto de vencer, cuando aparece Eris, desconcentrándolo. Debido a esto, termina siendo atrapado por su enemigo. En ese momento, la Diosa clava su Lanza en el cuerpo de ambos, matando a Christ, y dejando malherido al Cisne.
En la Película de Dorbal, salva a un soldado del Reino del Norte, siendo el primero en llegar a Asegard. Tras desaparecer misteriosamente, reaparece frente a Shiryu, como un Guerrero Divino, Midgard, ya que está siendo controlado por Dorbal. Lucha contra el Dragón, congelando uno de sus brazos y destrozando su Armadura, pero cuando Shiryu, se decide a combatir, ambos intercambian sus mejores ataques y terminan en un aparente doble KO. Sin embargo, Hyoga, se levanta y rebela a Dorbal, a quien logra golpear, pero prontamente cae vencido ante su enorme poder.
En la Película de Abel, debe hacer frente a Berenike, uno de los Guerreros de la Corona, quien previamente había acabado con Camus. Hyoga, tiene dificultades en el combate, ya que su enemigo está protegido por las llamas del Sol. Aún así y gracias a las palabras de su madre, logra ponerse de pie, lanzando un último ataque que congela y despedaza a Berenike. Ya debilitado, es derrotado por Atlas, otro Guerrero de la Corona. Luego, ya vistiendo la Armadura de Acuario y en un ataque combinado junto a Seiya y Shiryu, logran vencerlo.
En la Película de Lucifer, avanza en el Pandemonium gracias a Shiryu y Shun, pero debe quedarse a luchar con Moa, un Ángel Caído, capaz de producir Ilusiones y robar los recuerdos de la persona más importante para su enemigo. Esto hace que tome la apariencia de la madre de Hyoga, explicándole que si lo mata en ese estado, perderá todos los recuerdos que tiene de ella. El Cisne se resiste a combatir, pero su determinación por salvar a Athena y la Tierra es superior, por lo que finalmente ataca, derrotando a Moa, pero sacrificando lo más preciado para él
martes, 4 de octubre de 2011
Shun, Caballero de Andromeda
Su primera aparicion fue en el torneo galactico, donde se destaco por su tolerancia y habilidad con el manejo de su armadura, Andromeda, pero tras de ello se encuentra una gran historia.
Es huerfano al igual que los demas caballeros de bronce, pero el tiene un hermano, Ikki. En el momento en que fueron asignados los lugares de entrenamiento, a Shun le habia tocado la Isla de la muerte, pero su hermano con afan de protegerlo, cambio de lugar con el, llendo Shun a una edad muy joven a la Isla de Andromeda, donde gracias a la ayuda de su maestro Daidaloso Albiore ,Santo de Plata de Cefeo. Allí conoció a June, Amazona de bronce de camaleón y con la que entabla una cercana amistad. A la vez, también conoce a Reda y Spica, con quienes lucha por conseguir la armadura de Andrómeda. Tras seis años de duro entrenamiento, Shun obtuvo el reconocimiento como Santo de Bronce, transformándose (por sus grandes poderes) en el orgullo de la isla, cuando pudo pasar la prueba del sacrificio, consistente en atar al sujeto a dos rocas en medio del mar, la marea del cual subiría de tal manera que cubriese totalmente al candidato. Éste debía hacer explotar su cosmos de forma que se liberase de las cadenas y partiera el mar para sobrevivir. Shun eligió este método antes que combatir con sus compañeros y probar que era el más fuerte de todos. La prueba del sacrificio está inspirada en el sacrificio de Andrómeda.
En toda la serie no tiene mucha actividad, lo mas conocido es en la batalla de las 12 casas, en que combate a Afrodita de piscis, y la famosa escena en que revive a Hyoga, dando lugar a las criticas acerca de su homosexualidad, lo cual es completamente falso.
En la saga de hades Shun es el protagonista al ser el cuerpo escogido por hades, el alma mas pura en esta era. Cuando va en camino al Santuario es atacado por Sirius de Can Mayor, Dio de Mosca y Algethi de Hércules. Estos habían sido resucitados por Hades a cambio de su fidelidad, Shun logra derrotarlos usando su Cadena Nebular. Más tarde se encargaría de usar ese mismo ataque para que, junto con Seiya, Shiryū y Hyōga, se elevaran las Exclamación de Atena fusionadas. Al igual que los demás Santos de Bronce llega al Templo de Atenea cuando ella ya se había quitado la vida. Shion les explica el motivo de esta muerte y con la sangre de la diosa restaura las armaduras de Bronce. Luego, se dirigen al Castillo de Hades para ayudar a los santos de oro Mu, Milo y Aioria.
En el castillo de Hades, Shun lucha junto con los demás santos de bronce contra uno de los tres jueces del infierno Radamanthys de Wyvern. Este vence a todos sin dificultad, y solo es golpeado con Seiya quien ingresa al inframundo junto con él. Shun intenta con los santos de bronce restantes ingresar también al inframundo, pero el maestro Dohko les dice que para ello deben despertar el Arayashiki (el octavo sentido). Shun entra al infierno elevando su cosmos al máximo, y se encuentra con Seiya. Los dos cruzan la puerta del infierno, y se encuentran con el espectro Caronte, quien es el barquero para cruzar el río Aqueronte. Shun le ofrece a Caronte un medallón a cambio de ayudarlos a cruzar el río. Caronte acepta, sin embargo, a mitad del río lanza a Seiya de la barca, quien luego es salvado por Shun. Caronte sigue con la travesía, pero intenta arrojar a Seiya de nuevo, sorpresivamente, deja de atacar a los santos cuando observa los ojos de Shun porque alega que son los más puros que ha visto en su vida.
En la primera prisión, es confrontado por Lune de Balrog, quien lo juzga con su látigo. Shun empieza a dudar de los motivos que lo llevaron a lastimar a tantas personas a lo largo de su vida. Es salvado por la ilusión que Kanon usó en Lune.
En la segunda prisión, él y Seiya encuentran a Faraón de Esfinge quien junto con Cerbero trata de detenerlos, pero en ese momento hace su aparición Orfeo de Lira que con su Stringer Nocturne los deja inconscientes, después de levantarse se encuentran con Eurídice, quien es el motivo por el cual Orfeo está en el infierno. Orfeo se despide de Eurídice y se dispone a llevar a Shun y a Seiya a Giudecca.
En Giudecca, Orfeo duerme con su ataque de lira a todos los jueces del infierno y a Pandora. Él se dispone a atacar a Hades quien se encuentra sentado en su trono detrás de un velo. Sin embargo, Orfeo se sorprende mucho al observar que Hades se parece mucho a Shun. De todas maneras, Orfeo ataca, logra acabar con el Dios; pero luego se da cuenta que el cuerpo de Hades no estaba ahí, era solo era una ilusión. Apenas se da cuenta, Radamanthys lo ataca mortalmente. Orfeo, agonizando se niega a despertar a los demás jueces y a Pandora. Radamanthys lo ataca pero Orfeo sujeta a Radamanthys y le ruega a Seiya que lo ataque aun a costa de su propia vida. Seiya utiliza sus meteoros y Orfeo muere. Sin embargo, Radamanthys seguía vivo, como venganza intenta atacar, pero Shun hablando con la voz de Hades le dice que se detenga. Radamanthys cree que Shun está impostando la voz, entonces decide atacarlo, pero este nuevamente con la voz y con otro aspecto más fuerte le vuelve a increpar. El espectro pronto se da cuenta que Shun es el cuerpo elegido para ser la reencarnación de Hades. Seiya es atacado y enviado a uno de los infiernos: El cocytos.
Luego es atendido por Pandora, quien envía a los jueces a sus puestos. Shun-Hades, ordena a Pandora traer a Ikki. El fénix, quien ya sabía de la posesión, intenta desesperadamente sacar a Hades del cuerpo de Shun golpeándolo. Sin embargo, Shun-Hades reacciona atacándolo. Ikki una y otra vez se pone de pie luego de los ataques de Shun-Hades. No obstante, cuando Hades intenta liquidar a Ikki, este se da cuenta que su cuerpo no le responde y que estaba tratando de matarlo, entonces Ikki ve que el alma de Shun aparece de tras de su cuerpo diciendo que él se dejó poseer para que pudieran matar a Hades. Shun incita a Ikki a matar a Hades, sin embargo este no puede porque al atacar también mataría a su hermano. Ikki es derrotado y enviado al igual que Seiya, al Cocytos.
Después Shun-Hades, recibe a Athena y a Shaka en Giudecca. Saori ofrece su vida a cambio de que pare el Gran Eclipse que alinearía no solo a la luna con el sol sino al resto de los planetas del sistema solar. Hades acepta y toma una lanza para matar a Athena. Sin embargo, Athena detiene la lanza con sus manos diciendo que antes de asesinarla parará el Gran Eclipse. La sangre que emanaba de la mano de Saori, llega de casualidad al cuerpo de Shun-Hades, y este es exorcisado por el contacto. Shun cae y alma de Hades, rapta a Saori y se la lleva a los Campos Eliseos no sin antes convocar el tan temido Eclipse.
Shun se dirige con los demás caballeros hacia los Campos Eliseos.
En los Campos Eliseos: Al encontrarse con su primer enemigo, el dios menor de la muerte Tánathos, Shun viste la armadura dorada de Virgo, aunque por muy poco tiempo, porque es destruida por el dios rápidamente. Una vez Seiya ha acudido al templo en los Eliseos a socorrer a Atenea, sin nadie que pueda hacerle frente a Hypnos, Shun despierta su propia armadura Kamei. Sin embargo, Este derrota a Shun con su ataque sueño eterno, pero es vencido luego por Hyoga y Shiryu. Más tarde, en la tumba de Hades, une su cosmo al de Atenea y sus hermanos para vencer al verdadero cuerpo de Hades definitivamente.
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